¿Sientes un gran amor por los niños y te encuentras en la búsqueda de una carrera que te permita trabajar con ellos? Pues estudiar la carrera de puericultura puede ser una de las mejores opciones para ti.
En México existen 11,4 millones de habitantes que tienen cinco años o menos, lo que representa el 29,8% de la población menor de 18 años en el país, por lo que resulta necesario contar con especialistas en el área.
La puericultura se encarga tanto del desarrollo físico como psicológico de los niños, brindando un acompañamiento del niño desde su nacimiento hasta que cumple los 6 años de edad.
Se clasifica en 3 tipos:
Se trata de una disciplina complementaria de la pediatría, que estudia el desarrollo y la crianza saludable de los infantes.
Su objetivo primordial es asegurar las condiciones ideales para que la población infantil tenga condiciones saludables a nivel fisiológico, psicológico y social.
La puericultura postnatal proporciona herramientas que favorecen el crecimiento, alimentación, higiene, descanso, desarrollo psicomotor, inmunización y prevención de enfermedades en los niños.
Además, ofrece un enfoque integral, ya que también busca que el niño logre integrarse con éxito a la sociedad; de este modo, no se queda solo en el apartado físico, sino que también estudia las relaciones entre el niño y quienes lo rodean.
La labor de un puericultor va más allá de cuidar físicamente del recién nacido, pues se encarga de ayudar a los padres para que el pequeño obtenga capacidades psicosociales, motrices, y cognitivas apropiadas, además de prevenir enfermedades.
Sus funciones son amplias, e incluyen:
Los puericultores son personas especializadas en cuidados para una mejor salud y formación de los niños. Sus servicios son prestados en instituciones sanitarias de todos los países, donde son guía de las madres a quienes acompañan en la etapa inicial de la crianza.
Algunas ventajas de estudiar esta carrera son:
En definitiva, la salud de los niños es un aspecto de suma importancia, por lo que contar con profesionales especializados en el cuidado de este sector de la población, permitiría disminuir los riesgos que están propensos a sufrir.
Para trabajar en el ámbito de la puericultura es importante que la persona cuente con una titulación que le capacita como tal, siga formándose de manera periódica, asuma el compromiso con los niños, dirija el proceso de enseñanza y vele por el bienestar de los pequeños.
Además necesita tener ciertos valores como la tolerancia, motivación, responsabilidad, ética, adaptabilidad, entre otros.
Así que, si tu pasión por los niños va más allá de los simples cuidados, y te interesa forjar una mejor sociedad, cursa una Carrera en Puericultura.
En Roosevelt puedes estudiar el bachillerato en Puericultura en 3 o 2 años, donde aprenderás los conocimientos, prácticas y valores necesario para ayudar al desarrollo del niño:
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